Ruta de 10 días visitando los lugares más interesantes de Holanda, la mayoría de ellos en bicicleta. A la ida paramos en Luxemburgo. A la vuelta en París. Visitamos ciudades como Maastricht y Amsterdam, mercados del queso como los de Alkmaar y molinos como los de Zaanse Schans y Kinderdijk.
Iniciamos el viaje con un paseo en bicicleta por el centro histórico de Luxemburgo. Pasamos frente a lugares como el Palacio Gran Ducal, la Catedral y las Casamatas del Bock, admirando su encanto medieval.
Recorrimos Maastricht en bicicleta y pedaleamos hasta el Molino Van Tienhoven, disfrutando del paisaje. Para cerrar el día, dimos un paseo por Valkenburg, explorando sus calles con encanto y su rica historia.
Seguimos nuestras visitas en bicicleta por Ámsterdam, recorriendo sus emblemáticos canales, la Plaza Dam y el Museo Rijksmuseum. Disfrutamos del ambiente vibrante y la arquitectura única de la capital holandesa.
Continuamos nuestra ruta en bicicleta por Utrecht, admirando sus canales y la Torre Dom. Seguimos en coche hasta Amersfoort, explorando su casco antiguo y la icónica Koppelpoort. Descubrimos estas preciosas ciudades.
Proseguimos nuestra aventura en Edam, conocido por su delicioso queso, y luego visitamos Volendam, un pintoresco pueblo pesquero. Terminamos en Zaanse Schans, donde admiramos los famosos molinos de viento.
Seguimos explorando en La Haya, donde visitamos el Palacio de la Paz y la playa de Scheveningen. Luego, llegamos a Delft, famosa por su cerámica y su pintoresca plaza central. Ambas ciudades nos cautivaron con su historia y encanto.
Continuamos en Alkmaar, donde disfrutamos del famoso mercado del queso. Luego, exploramos Haarlem, con su impresionante iglesia de San Bavón, y finalmente llegamos a Leiden, conocida por su universidad y encantadores canales.
En nuestro último día en Holanda, exploramos Róterdam, admirando su moderna arquitectura y el puerto más grande de Europa. Luego, visitamos Kinderdijk, donde paseamos en bicicleta entre sus famosos molinos de viento.
En el viaje de regreso, hicimos una parada junto a la Torre Eiffel para disfrutar de su imponente vista. Luego, continuamos hacia Issoire, donde descansamos y aprovechamos para conocer su encantador centro histórico.